Este viernes 28 de Junio se inauguró un conjunto expositivo en el Museo de las Mujeres que está ubicado en la calle Rivera Indarte 55: pleno centro, frente a lo que antes era la Legislatura. Muchas personas pasan por su entrada sin saber que en su interior se esconde una potente propuesta museística, no sólo en términos de “obras”, sino especialmente en materia de constructo colectivo. Ciertamente, la gran potencia del proyecto radica en la presentación de exposiciones fuertemente atravesadas por una mirada política -no excluyentemente de géneros-. Es un espacio imprescindible para la escena local.
El conjunto inaugurado recientemente hace gala de posiciones ideológicas a la hora de mirar la creatividad en una ciudad y provincia que siempre tuvo un papel protagónico en la escena del arte comprometido nacional y regional.
Un asunto que me gustaría subrayar, más allá de la gran calidad del planteo curatorial, son las asistentes a la jornada inaugural: docentes de toda la vida cuya caja de resonancia va mucho más allá del aula y habla de nuevas generaciones que aprendieron de estas actrices del arte en el espacio público, y que por circunstancias que merecerían un análisis más detallado, son difíciles de encontrar en las actividades culturales. Referentes de un arte posicionado en las últimas décadas del siglo XX, así como el amanecer del presente siglo, se dieron cita en el museo para compartir con su presencia una prolongación del compromiso que caracterizó su práctica.
El conjunto inaugurado recientemente hace gala de posiciones ideológicas a la hora de mirar la creatividad en una ciudad y provincia que siempre tuvo un papel protagónico en la escena del arte comprometido nacional y regional.
Un asunto que me gustaría subrayar, más allá de la gran calidad del planteo curatorial, son las asistentes a la jornada inaugural: docentes de toda la vida cuya caja de resonancia va mucho más allá del aula y habla de nuevas generaciones que aprendieron de estas actrices del arte en el espacio público, y que por circunstancias que merecerían un análisis más detallado, son difíciles de encontrar en las actividades culturales. Referentes de un arte posicionado en las últimas décadas del siglo XX, así como el amanecer del presente siglo, se dieron cita en el museo para compartir con su presencia una prolongación del compromiso que caracterizó su práctica.
Con comprometida emoción corroboré que la trascendencia de su legado, así como la fortaleza de su presencia era una señal de urgencia en el tiempo que nos toca vivir, una vez más.
https://cultura.cba.gov.ar/exposiciones-colectivas-en-el-museo-de-las-mujeres/
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