(Viene de El cine, una película que dura más de 100 años)
Nacido en formato 35mm, y primo hermano de la película fotográfica, el cine fue mudo hasta que Carlitos Chaplin no pudo evitar, en 1927, que aparecieran las películas sonoras. La proyección ha ido variando conjuntamente con los cambios tecnológicos. El pibe (1921), de Chaplin tenía una relación de pantalla propia del cine mudo, bastante apaisada, pero M, el vampiro de Dusseldorf (1931) era casi cuadrada por haber dejado espacio en el fotograma para la banda de sonido. Sin embargo, ese mismo año las grandes compañías productoras acordarían un formato nuevamente parecido al del cine mudo denominado Academy Standard Flat, de fotogramas más pequeños. De esa época y formato es El Ciudadano, de Welles (1941) unánimemente considerada la mejor película de todos los tiempos.
El 16mm fue el formato inventado en 1923 por Kodak. Aun le perdura cierto halo alternativo que deviene de su génesis: una alternativa económica al 35mm. Es el elegido por los directores noveles o independientes. Leaving Las Vegas, de 1995, con Nicolas Cage, y un Oscar, fue filmada así.
El Súper 8, también hijo de Kodak es la evolución del 8mm, Nació en 1932 y es un formato doméstico para rodar y ver películas de forma hogareña. Los cortometrajistas aun le idolatran por textura y estética.
El Cinerama, un grandote en la familia, es desciende del cineorama, (una proyección de diez proyectores al unísono). Lo inventó Fred Waller para ser la evolución del cine, a costa de rodar con tres cámaras, y proyectar desde tres haces sincronizados, produciendo una pantalla monumental. La conquista del oeste (1962) fue rodado con este sistema.
El Cinemascope utilizaba la película standard y lo patentó Henri Chrétien en 1953.
Al igual que el cinerama, planteaba grandes imágenes y extendidas a lo ancho, pero filmaba con una única cámara, utilizando lentes para comprimir la imagen en el rodaje, y luego un lente inverso para descomprimir, al proyectar. Panavision mejoró las condiciones ópticas.
Luego vinieron el VistaVisión, con la película circulando horizontalmente, el Todd AO, el Ultra Panavision 70 (usado para Ben Hur), el Tecnirama y Súper 35mm (hoy mayoritario) que registra en negativo. En el medio se escuchó un ruido y sonó en Dolby Stereo, un avance que data de 1976, sonido óptico de cuatro canales.
Hoy, los cines IMAX son la vanguardia, con imágenes enormes y de muy alta calidad pero sólo para sus propias salas.
Nacido en formato 35mm, y primo hermano de la película fotográfica, el cine fue mudo hasta que Carlitos Chaplin no pudo evitar, en 1927, que aparecieran las películas sonoras. La proyección ha ido variando conjuntamente con los cambios tecnológicos. El pibe (1921), de Chaplin tenía una relación de pantalla propia del cine mudo, bastante apaisada, pero M, el vampiro de Dusseldorf (1931) era casi cuadrada por haber dejado espacio en el fotograma para la banda de sonido. Sin embargo, ese mismo año las grandes compañías productoras acordarían un formato nuevamente parecido al del cine mudo denominado Academy Standard Flat, de fotogramas más pequeños. De esa época y formato es El Ciudadano, de Welles (1941) unánimemente considerada la mejor película de todos los tiempos.
El 16mm fue el formato inventado en 1923 por Kodak. Aun le perdura cierto halo alternativo que deviene de su génesis: una alternativa económica al 35mm. Es el elegido por los directores noveles o independientes. Leaving Las Vegas, de 1995, con Nicolas Cage, y un Oscar, fue filmada así.
El Súper 8, también hijo de Kodak es la evolución del 8mm, Nació en 1932 y es un formato doméstico para rodar y ver películas de forma hogareña. Los cortometrajistas aun le idolatran por textura y estética.
El Cinerama, un grandote en la familia, es desciende del cineorama, (una proyección de diez proyectores al unísono). Lo inventó Fred Waller para ser la evolución del cine, a costa de rodar con tres cámaras, y proyectar desde tres haces sincronizados, produciendo una pantalla monumental. La conquista del oeste (1962) fue rodado con este sistema.
El Cinemascope utilizaba la película standard y lo patentó Henri Chrétien en 1953.
Al igual que el cinerama, planteaba grandes imágenes y extendidas a lo ancho, pero filmaba con una única cámara, utilizando lentes para comprimir la imagen en el rodaje, y luego un lente inverso para descomprimir, al proyectar. Panavision mejoró las condiciones ópticas.
Luego vinieron el VistaVisión, con la película circulando horizontalmente, el Todd AO, el Ultra Panavision 70 (usado para Ben Hur), el Tecnirama y Súper 35mm (hoy mayoritario) que registra en negativo. En el medio se escuchó un ruido y sonó en Dolby Stereo, un avance que data de 1976, sonido óptico de cuatro canales.
Hoy, los cines IMAX son la vanguardia, con imágenes enormes y de muy alta calidad pero sólo para sus propias salas.
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