El negocio del porno es -y fue- tan vigoroso que calienta a cualquiera con dos dedos (de frente). Cabe recordar que hace décadas, cuando se debatían entre los videos beta-max o los vhs, el porno se volcó al vhs y todo acabó muy rápido. Casi precozmente.
En 2007, los hábitos de consumo web, como recurso facilitador de contenidos para entretenimiento, se disponen a hacer polvo otros mitos: cada vez menos gente paga por porno. Mirar una fantasía sexual es tan fácil como chequear el clima. Y lo mismo se puede hacer por el prójimo: Los videos de sexo amateur terminan en tu cara con tanta facilidad que están corriendo a los profesionales. La propia arquitectura de la industria (tal vez la más grande de internet) está sacudiéndose.
Todos lo medios hablan de ello y, en el último mes, tanto Clarín como, El País de España se han detenido a reseñar el asunto. El periódico español dice “el 12% de las páginas web al-bergan contenidos para adultos, la palabra más buscada en la red es "sexo" y el 35% de las descargas tienen contenido sexual”. Un video de GOOD Magazine para la red es la fuente, y agrega que cada segundo 30.000 personas estarán viendo sexo on-line, que hay 300 sitios nuevos por día y que el 90 % viene de EEUU. Con esto, los norteamericanos se mandaron a guardar 3.000 millones de verdes en 2006.
Con la conexión, hoy nadie cae en la incomodidad de pedirle a la chica del videoclub “colitas calientes
Comentarios
waaaaaaa
recently people have done something in the name of art.
sex too ?
what other too ?
.)
v